KOLDO DÍAZ

HONDARRIBIA,

TRADICIONES

ÚNICAS

Nos muestra tradiciones de Hondarribia ligadas al mar, historias de huevos rosas y madrinas…

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Koldo Díaz. Kaialde Pastelería Cafetería.

SAN MARCOS,

UNA OPILLA

CADA 25 DE ABRIL

EN HONDARRIBIA

Hondarribia ha estado históricamente vinculada al mar y a la defensa del territorio, pero cuenta también con otras tradiciones como la de San Marcos, vinculadas a la agricultura. Una costumbre que hoy ha quedado en el regalo que las madrinas hacen a sus ahijados solteros de un bizcocho con tantos huevos duros como años tengan y que proviene de una cita religiosa y romería en la que se bendecían los campos.

Opilla de San Marcos de Hondarribia

Cada 25 de abril tenían lugar procesiones a las ermitas cercanas a la ciudad en las que, tras una misa, se bendecían los campos y se disfrutaba de un almuerzo y de un romería. Un almuerzo basado en talos de maíz y huevos cocidos. Paulatinamente fueron desapareciendo las procesiones, la bendición de los campos, las romerías…. hasta quedar hoy en día la festividad en una bendición de las opillas, herederas de aquellas tortas de maíz, y el disfrute en las campas, montes y zonas rurales de una merienda festiva.

Esta torta regalada a los ahijados, que tiene su paralelismo en la merienda que se entregaba a los niños en las romerías, tiene costumbres similares en otras población de Euskadi. Pero una anécdota como la que una madrina encargara en lugar del talo un bizcocho para su ahijado, circunstancia que se hizo muy popular, hizo virar aquella costumbre a la opilla que hoy día conocemos.

Algo similar sucedió con los huevos, que nunca tuvieron colores. Pero un accidente en el obrador de la pastelería y bombonería Elgorriaga, que cocieron los huevos con unas garrapiñadas, ofrecieron el vistoso color rosa con el que los conocemos hoy.

Es una tradición muy arraigada y de gran popularidad… pero vámonos al mar y a la vinculación de Hondarribia con las traineras. El remo, el club y, sobre todo, la trainera, la Ama Guadalupekoa conforman una de la imágenes más importantes de Hondarribia. Por muchos factores, por ser un deporte tradicional vasco entroncando íntimamente con el mundo de la pesca, por nuestra condición de ciudad marinera, por su esencia de esfuerzo en equipo que representa, por todos los valores positivos del deporte, por los deportistas hondarribiarras que pasan por las tostas de las embarcaciones…

El deporte de las regatas de traineras en general está íntimamente, como el conjunto de los deportes tradicionales vascos, con el trabajo. Bien sea con la hipótesis de la pesca de la ballena y su despiece en el mar entre las distintas embarcaciones de las localidades del Cantábrico como único medio de llevar la captura a tierra. Bien sea tomando como modelo los botes rápidos para la pesca de sardina y anchoa a la que se vieron abocados los arrantzales a mitad del siglo XVIII, historia en la que el ingeniero naval francés Henri-Louis Duhamel du Monceau sitúa la creación de este tipo de embarcaciones en Hondarribia.

Pasaia parece ser el lugar en el que las tareas de remolque a puerto de las grandes embarcaciones dan origen a la competición deportiva. El sustancioso pago a pequeñas embarcaciones tripuladas por entre 12 a 16 personas por estas tareas, establecía una dura competencia entre estas txalupas nada más avistarse los grandes buques desde la bocana del puerto.

Un desafío en el año 1871 entre las embarcaciones de Pasaia y Hondarribia, disputado entre nuestra ciudad y San Sebastián, puede considerarse el inicio de esta práctica como fórmula deportiva. Una prueba que, debido a la popularidad que alcanzó, dio origen ocho años después a lo que podríamos considerar las regatas de la Concha. Y fue también en este caso un desafío entre Pasaia y Hondarribia. En ambos, en 1871 y 1879, vencieron las tripulaciones pasaitarras.

Está claro que hoy en día el color verde nos identifica, pero no está tan claro el por qué el verde y no otro color. Esto de los colores proviene de los años 40 del siglo pasado y se puso como obligatoria para que los espectadores desde tierra pudieran distinguir a su bote.

Koldo nos ha hablado de tradiciones y nos muestra la elaboración de la opilla de San Marcos de la que es uno de los guardianas de su receta.

Koldo Díaz
Kaialde Kafetegia
San Pedro, 10 · Hondarribia